Códigos QR, laberintos con mensajes
En el año 2008 ya escribíamos sobre los códigos QR y nos preguntábamos si en un futuro próximo hablaríamos de ellos. La respuesta a esa pregunta formulada hace casi cuatro años es que sí. Los códigos QR ya están presentes en nuestra vida cotidiana.
El principal motivo del auge de los códigos QR es la adopción, finalmente, por parte del consumidor de Smartphone en sus experiencias diarias, convirtiendo a los teléfonos móviles en una herramienta de marketing fundamental para las marcas.
La evolución de estos códigos está siendo tranquila, aumentando sus utilidades a medida que los usuarios se van incorporando a los Smartphones y dispositivos móviles. Las limitaciones que presentan los códigos QR son mínimas y con un poco de ingenio e innovación se pueden presentar datos, información o contenidos de una forma diferente.
Hoy en día podemos ver códigos QR en diferentes lugares, desde en los paquetes de productos, en vallas, en tarjetas de visita, en pegatinas, en marquesinas, en restaurantes, en revistas, en autobuses o incluso en el tejado de los edificios.
Los usos que le pueden dar a esta herramienta de marketing son muchos, aunque serán inútiles si no ofrecen buenos contenidos que puedan interesar al consumidor. Los códigos QR pueden incluirse en revistas para que el lector, tras escanear el código con su teléfono, llegue a un vídeo online con contenido adicional al que está leyendo o también para desbloquear un cupón descuento en un restaurante.